Es Noticia, Spielberg presidirá el jurado del próximo Festival de Cannes - 28/02/2013 5:03:01
"París, 28 feb (EFE).- El cineasta estadounidense Steven Spielberg presidirá el jurado de la próxima edición del Festival de Cannes, que se celebrará entre el 15 y el 26 de mayo, informaron hoy los organizadores.Ver artículo...
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Que opina? Django desencadenado, el western según Tarantino - 02/02/2013 3:01:07
" Tres años después de que los judíos ajustaran cuentas con los nazis en "Malditos bastardos" ("Inglourious Basterds", 2009), Quentin Tarantino propone en su nuevo trabajo, "Django desencadenado" ("Django Unchained", 2012), una venganza contra la esclavitud y el racismo de los Estados Unidos de 1858, dos años antes de que estallara la Guerra Civil cuyo desenlace aparece reflejado en "Lincoln" (Steven Spielberg, 2012), casualmente estrenada en España el mismo día que el film que nos ocupa."Django desencadenado" es además el primer y esperado western de Tarantino. Debido a la influencia del género en sus anteriores películas, plagadas de pistoleros, y su gusto por los tensos "Mexican standoff" que acaban resueltos en sangrientos tiroteos, solo era cuestión de tiempo que el realizador estadounidense decidiera aportar su visión del western si bien él prefiere referirse a su película como un "southern". Para ello, como era de esperar, toma como principal referente el subgénero, el "spaghetti western", los trabajos de Sergio Leone o Sergio Corbucci en lugar del enfoque más clásico de John Ford o Howard Hawks, si bien la huella de estos realizadores es inevitable en cualquier western de hecho, "Río Bravo" (H. Hawks, 1959) es una de las películas favoritas de Tarantino, y a pesar de haber declarado que odia a Ford, en "Malditos bastardos" imitó uno de los planos más característicos de "Centauros del desierto" ("The Searchers", 1956).
Aunque el ejecutor de esta nueva venganza es un esclavo, Django (Jamie Foxx, que comparte un divertido encuentro con Franco Nero, el Django de Corbucci), el protagonista de la primera secuencia tras los títulos de crédito es un peculiar dentista alemán, el doctor King Schultz (Christoph Waltz), a quien Tarantino parece haber rescatado del universo de "El gran silencio" ("Il grande silenzio", S. Corbucci, 1968). Y es que en realidad Schultz es un cazarrecompensas que se cruza en el camino de Django. El alemán compra, libera y entrena al esclavo a cambio de su colaboración. Con el tiempo y tras varios trabajos juntos, se forja una relación de amistad y Schultz decide ayudar a Django en una complicada misión.
El objetivo es encontrar y liberar a Broomhilda von Shaft (Kerry Washington), la esposa de Django. El conflicto es que la esclava está en "Candyland", la plantación del cruel Calvin Candie (Leonardo DiCaprio), conocido por su afición a las peleas de esclavos. El plan es fingir interés por adquirir a uno de los mejores luchadores de Candie para llegar hasta Broomhilda. Y el resultado es… bueno, como podéis imaginar viniendo de Tarantino, algo sangriento. La historia puede sonar sencilla pero el cineasta emplea 165 minutos en contarla. La primera hora apenas se nota, se disfruta la presentación y la relación entre Schultz y Django, pero desde que se inicia la marcha a la mansión de Candie la película comienza a tambalearse, a alternar momentos intensos e hilarantes la aparición de Stephen (Samuel L. Jackson) con otros repetitivos y poco inspirados el engaño de la recompensa.
La última media hora es claramente la parte más floja de "Django desencadenado", con el castigo frustrado el Tarantino de los 90 habría hecho algo memorable ahí, la prescindible salida de "Candyland" acompañada de otro cameo "estelar" no desvelo de quién pero queda fatal… No es un problema de metraje o de puesta en escena la cámara siempre está donde tiene que estar, y desde luego no de interpretaciones el reparto está sensacional, destacando otra vez Waltz, lo que no termina de funcionar del todo es el guion. Por un lado, por la necesidad de Tarantino de alargar las conversaciones, a menudo interrumpiéndolas con detalles irrelevantes, imagino que buscando naturalidad o comicidad. Normalmente sus diálogos atrapan, pero a veces no son tan ingeniosos, y desconectas, descubres que la película está parada.
Por otro lado, a partir de la primera hora se va diluyendo el papel de Waltz para dar más importancia a Foxx, y el primero encarna un personaje mucho más interesante que el segundo. La interpretación es fundamental, y el austriaco es un portento, pero el estadounidense tampoco lo hace mal, cumple con lo que le han dado, una especie de superhéroe negro, que no es precisamente el personaje más carismático escrito por Tarantino. Por suerte, los puntos fuertes y los numerosos grandes momentos de "Django desencadenado" compensan con creces sus flaquezas. La entrada de Schultz, la muerte del sheriff o la discusión sobre las máscaras del Ku Klux Klan son las escenas que recordaremos de esta película excesiva, hilarante, hermosa y violenta.
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Interesante, Lincoln, algunos fines justifican los medios - 25/01/2013 7:10:34
" Nos acercamos a febrero y la cartelera española está que arde. El pasado fin de semana se estrenaron dos de las películas más esperadas del año pasado, "Django desencadenado" ("Django Unchained", Quentin Tarantino, 2012) y "Lincoln" (Steven Spielberg, 2012), probable triunfadora en la próxima edición de los Oscar parte con 12 nominaciones.Curiosamente, los nuevos trabajos de Tarantino y Spielberg coinciden escarbando en el tema de la esclavitud en Estados Unidos, pero el enfoque es tan diferente como cabe esperar de dos cineastas cuyo únicos rasgos comunes parecen ser la pasión por el séptimo arte y el respeto por la profesión que tan ejemplarmente realizan. La intención del director de "Lincoln" es la de recrear un momento histórico fundamental tanto para el decimosexto presidente de los Estados Unidos de América como para ese país, con el objetivo no solo de entretener, de ofrecer un interesante relato con el que pasar la tarde (casi dos horas y media dura el film) sino también con finalidad didáctica, y buscando el debate y la reflexión, que el espectador se levante de la butaca con algo en lo que pensar.
Cuenta Spielberg que la figura de Lincoln le fascina desde que era niño, y llevaba años intentando filmar una película sobre el personaje pero el proyecto no terminaba de arrancar. Con la colaboración de Doris Kearns Goodwin autora del libro en el que se basa el film, "Team of Rivals: The Political Genius of Abraham Lincoln" y Tony Kushner coguionista de "Munich" (S. Spielberg, 2005), el cineasta retomó la idea y decidió centrar la acción en los últimos cuatro meses de la vida del presidente, el periodo en el que se abolió la esclavitud y terminó la guerra civil, en lugar de realizar un biopic que abarcara desde su nacimiento hasta su muerte como hizo D.W. Griffith en 1930 (el Lincoln encarnado por Walter Huston era un tanto simplón).
Aunque Spielberg no descuida otros puntos de interés, como el conflicto bélico o la vida personal del presidente, el eje central de "Lincoln" es la discusión y aprobación de la decimotercera enmienda en la cámara de representantes. Un asunto que permite al realizador explorar las habilidades políticas del protagonista, así como ejercitar sus propias habilidades como narrador, tratando de enganchar al público en un proceso donde no falta el suspense y la emoción. Spielberg se esfuerza por subrayar la importancia de lo que estaba en juego, restando impacto y verosimilitud a algunas escenas. Es como si los personajes fueran conscientes de lo que va a pasar, y hablaran con perspectiva histórica, a menudo con tono grave y profundo. Por fortuna, acertados destellos de humor equilibran la balanza.
No está inspirado el director con el ritmo y la exposición de los hechos, acaba cansando el incesante diálogo intercalado con miradas melancólicas de Lincoln y es muy fácil desconectar de la trama con tanta interrupción y tanto personaje secundario (a menos que seas un apasionado de la Historia o sea tu segundo visionado). No puedo evitar recomendar al lector del mismo modo que Alberto me lo recomendó a mí que recupere una de las joyas de Otto Preminger, "Tempestad sobre Washington" ("Advise & Consent", 1962), que parece haber sido un referente para Spielberg a la hora de plasmar los entresijos del juego político. La comparación no le deja en buen lugar, y esto lo digo sin menosprecio alguno sobre el talento del responsable de "Lincoln", uno de los más importantes cineastas vivos, maestro en el arte de emocionar al espectador. Por cierto, en algún que otro momento creí reconocer el estilo de otro grande, Clint Eastwood, su colaboración ha debido dejar huella.
Todos recordamos que Liam Neeson iba a ser el encargado de dar vida al Lincoln de Spielberg, hasta que decidió que había esperado demasiado y dejó el puesto vacante. Daniel Day-Lewis aceptó el papel y su interpretación es tan impresionante que nadie duda que ganará su tercer Oscar. El actor británico se mete en la piel del personaje y se pierde en él, se entrega hasta tal punto que en pocos minutos ha conseguido desaparecer y solo vemos y escuchamos a Lincoln; tanto es así que le invade a uno la tristeza en cierta escena final, como si fuera un testigo más en aquella habitación. Un formidable retrato al que contribuye la visión de Spielberg, la música de John Williams, la fotografía de Janusz Kaminski y el apoyo de compañeros de reparto, en especial Sally Field, David Strathairn y Jackie Earle Haley, que comparte una breve pero intensa negociación con el protagonista.
Es de agradecer que Spielberg haya procurado presentar a Abraham Lincoln de la manera más humana y realista que le ha sido posible a fin de cuentas es su interpretación de un personaje al que admira (y una película, no un documental), de este modo no solo resulta más creíble sino que sus logros adquieren mayor mérito. Teniendo la película un centro de atención tan poderoso, llama la atención que se haya reunido un extenso y espectacular plantel de intérpretes. No hay tiempo para todos y es una pena que John Hawkes, Jared Harris o Joseph Gordon-Levitt estén tan desaprovechados. Por el contrario, Tommy Lee Jones saca jugo a sus pocos minutos y protagoniza una de las mejores secuencias de la película, cuando la cámara lo sigue y descubrimos el motivo de su apasionada defensa de la igualdad entre blancos y negros.
En definitiva, "Lincoln" es un ambicioso, cuidado sensacional diseño de producción de Rick Carter y sólido drama con tintes de thriller político y orgullo patriótico que tiene en un portentoso Daniel Day-Lewis su mejor arma para cautivar al espectador y resistir el paso del tiempo como uno de los títulos más destacables de 2012. Oh, y un consejo. Si tenéis la opción, id a ver la película en versión original, el doblaje destruye el extraordinario trabajo de los actores (sobre todo el de Day-Lewis y Field); podéis comprobarlo con las dos versiones del tráiler que os dejo a continuación.
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Noticia, El lado bueno de las cosas, la película - 21/01/2013 7:14:17
" Además de "Bestias del sur salvaje" ("Beasts of the Southern Wild", Benh Zaitlin, 2012), el próximo viernes se estrena en España la nueva película de David O. Russell, "El lado bueno de las cosas" ("Silver Linings Playbook", 2012), la única que puede amargar la fiesta de los Oscar a "Lincoln" (Steven Spielberg, 2012) porque "Amor" ("Amour", Michale Haneke, 2012) lo tiene prácticamente imposible, aun siendo la mejor de todas las nominadas."El lado bueno de las cosas" era una producción atractiva por su director y su elenco de actores sobre todo por la pareja protagonista, dos jóvenes estrellas con legiones de fans pero el interés aumentó tras su triunfo en el festival de Toronto. En los Globos de Oro se llevó el galardón de mejor actriz protagonista en comedia o musical y en los premios de la crítica norteamericana se impuso en cuatro categorías: mejor comedia, mejor actriz y actor de comedia y mejor reparto del año (en cualquier género). La noche del 24 de febrero podría conseguir ocho Oscar. Un dato curioso sobre sus nominaciones: desde "Rojos ("Reds", Warren Beatty, 1981) ningún título competía por las estatuillas de mejor película, dirección, guion y los cuatro apartados de interpretación (actor y actriz protagonista más actor y actriz de reparto). Algo bueno debe tener, ¿no?
La sinopsis de "El lado bueno de las cosas"
Russell firma el guion de la película, adaptación de la novela "The Silver Linings Playbook" (2008) escrita por Matthew Quick. La historia gira en torno a un profesor divorciado que vuelve a la casa de sus padres tras una estancia en una institución mental, y trata de reconciliarse con la que fue su esposa. Sin embargo, su vida cambia de rumbo cuando conoce a Tiffany, una chica que arrastra sus propios problemas…
El director
David Owen Russell es un cineasta de 54 años nacido en Nueva York que empezó a ser conocido internacionalmente tras dirigir "Tres reyes" ("Three Kings", 1999). Su primer largometraje fue "Spanking the Monkey" (1994), por la que recibió varios premios destacables: mejor guion de un debutante y mejor ópera prima en los Independent Spirit Awards y premio del público en el festival de Sundance. Su segundo trabajo fue "Flirteando con el desastre" ("Flirting with Disaster", 1996), donde ya contó con un amplio elenco de caras conocidas, entre las que destacaban Ben Stiller, Patricia Arquette, Téa Leoni, Richard Jenkins y Josh Brolin, entre otros.
Después del éxito de la comedia de acción bélica protagonizada por George Clooney y Mark Wahlberg, Russell regresó al tono de sus primeros trabajos con "Extrañas coincidencias" ("I ? Huckabees", 2004), un film recordado por los vídeos que se filtraron en Internet (aquí uno, aquí otro) donde se podía comprobar el mal ambiente que hubo durante el rodaje y el amargo enfrentamiento entre el director y una de sus actrices, Lily Tomlin con la que ya había trabajado en "Flirteando con el desastre". Los rostros de Dustin Hoffman, Jude Law, Naomi Watts, Isabelle Huppert, Jason Schwartzman y Wahlberg aparecían en el cartel pero la película no fue bien recibida.
Tuvieron que pasar seis años para poder ver un nuevo trabajo de David O. Russell, "The Fighter" (2010), drama familiar y de boxeo con el que logró su primera nominación al Oscar. Christian Bale y Melissa Leo ganaron las dos estatuillas con las que fue premiado el film, donde el cineasta volvió a contar con Wahlberg, el actor con el que más veces ha repetido. Después de "El lado bueno de las cosas", Russell comenzó el rodaje de "Nailed", con Jessica Biel, Jake Gyllenhaal, James Marsden, Catherine Keener y Tracy Morgan. Esta nueva comedia romántica ha resultado ser una problemática producción y aunque en principio debería llegar a los cines este año, también es posible que no la veamos nunca. Lo próximo del director es "American Bullshit", donde contará con Bale, Cooper, Jeremy Renner, Amy Adams y Louis C.K.
Los actores de "El lado bueno de las cosas"
Parece claro que el mayor talento de Russell está en sacar el mayor rendimiento de sus repartos, y por eso no sorprende que siempre cuente con actores conocidos y de talento. Los rostros principales de "El lado bueno de las cosas" son los de Bradley Cooper y Jennifer Lawrence aunque cabe destacar la participación de dos veteranos como Jacki Weaver "Animal Kingdom" (David Mich
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